Te ofrecemos unos sencillos consejos para protegerte del phishing
Tras la vuelta de vacaciones seguro que te encuentras con el buzón del correo electrónico lleno. La mitad, o más, será publicidad legítima pero también habrá algún que otro correo tipo phishing que mediante engaños intentará robar datos y demás información confidencial, así que cuidado al abrir el correo. Antes de enumerar los consejos para evitar este tipo de trampas, que sepas que lo mejor para evitar caer en estos engaños es la desconfianza hacia la información que te llegue, es decir, si dudas de algún mail, bórralo o intenta contactar con el remitente por teléfono, nunca respondas ni envies información respondiendo a esos mails.
4 consejos para protegerte del phishing
- Filtra todo correo que te parezca sospechoso, utiliza la lógica: un mail frauduleno (de tipo phishing) suele adoptar el nombre y logotipo de alguna empresa real, incluso tendrá un aspecto corporativo similar a esa empresa, así que no te fies por su aspecto exterior. Fíjate en:
- Utilizan direcciones de correo extrañas o con caracteres alfanuméricos sin sentido. Otras veces incluso pueden cambiar una letra del dominio o web real y así parecer todavía más reales.
- Muchas veces los textos incluyen varias faltas de ortografía, o parecen malas traducciones.
- Usan reclamos a ofertas o regalos o todo lo contrario te informan de problemas graves en facturas no pagadas, pedidos no realizados, etc. que te llevan a no pensar con claridad y realizar la acción que te requieren en segundos, sin pesártelo dos veces.
- Si el mail que has recibido parece venir de tu banco, que sepas que ellos NUNCA te van a pedir tus datos por correo electrónico. Así que si recibes un mail de tu banco explicando que ha habido un problema con tu cuenta, y te piden que les envies tus datos (claves) para solucionarlo, seguro que es una ESTAFA. Bórralo y si quieres estar más seguro ponte en contacto por teléfono con tu banco para denunciar el intento de estafa.
- Cuidado con los enlaces o links de los correos electrónicos: este punto tiene relación a los dos anteriores. Jamás hagas clic en los enlaces que te envian por email, lo más seguro es que te lleven a portales o páginas web fraudulentos. Aunque en el enlace leas una dirección que conozcas, seguramente ese link abrirá otro distinto, así que si por alguna razón tienes la duda de hacer clic, no lo hagas, y accede a ese link tecleando la dirección completa que lees en la barra del navegador. De esta forma te aseguras de ir a esa página y no a cualquier otra oculta en el link.
También puedes mirar si el link o la dirección que te indican lleva el protocolo de seguridad https. Si se trata de una web conocida (tienda online, empresa corporativa, etc.) y no está alojada en un sevidor seguro (https) hay bastantes probabilidades de que sea fraudulenta, así que con cuidado.
- Cuidado con los mensajes en las aplicaciones de mensajería así como en las redes sociales. Si hasta ahora hemos hablado de emails, no podemos cerrar este apartado sin comentar los mensajes que recibimos mendiante nuestro móviles o las redes sociales. Al igual que con los mails, los hackers pueden utilizar mensajes falsos (en apps de mensajería ) o banners de publicidad (en redes sociales) con links que redireccionan a formularios para captar nuestros datos.
Y ante eso como hemos dicho al principio tu eres el mejor filtro de seguridad, ante la mínima duda o sospecha, elimina el mensaje. Para estar más seguro, si tienes algún conocido experto en estas cosas, pregúntale, o incluso si quieres pregunta en tu alrededor si alguien ha recibido algo parecido, pero ante cualquier duda de sospecha elimina el mensaje, incluso de la papelera.
Ya sabes, para protegerte del phishing lo importante es utilizar el sentido común, desconfiar de los mails, no apresurarte a responder nada, no enviar nunca por mail tus datos confidenciales y ante cualquier sospecha preguntar o confirmar el mail por teléfono.